jueves, 23 de septiembre de 2010

Presión Para No Bajar el IVA

Llego un respiro al gris presupuesto federal, el que el Diputado priísta José Alberto Cano Valdez califico de NiNi, porque no genera crecimiento ni abate la pobreza, presupuesto que es tibio porque no da el brinco y se estanca en la miscelánea fiscal, no busca agrandar su base de contribuyentes, no cambia los impuestos y tampoco quiere eliminar la evasión fiscal.
Un presupuesto federal, tan soso, que de moverlo crearía inestabilidad económica en el país, por eso organismos internacionales como el Banco Mundial (BM) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) han externado su posicionamiento sobre la alta posibilidad de ser ajustado frente un 2011 lleno de competencia electoral. A estos posicionamientos, crece la incógnita de la autonomía del Banco de México (Banxico), quien su Gobernador Agustín Carstens salio como queriendo completar los señalamientos de estas instituciones financieras, pero a diferencia del BM y el BID, quienes optaron por no politizar sus declaraciones, Carstens refirió que la política fiscal del gobierno federal es un “poderosos aliado” para la estabilidad económica y por haber anticipado “oportunamente” el efecto de la crisis global.
Contrariamente a la tendencia mundial, el PRI busca reducir este año un punto porcentual el Impuesto al Valor Agregado, con una débil justificación que exige al gobierno federal ser más eficiente en el gasto público, pero no le dice cómo, tampoco busca aplicarlo a sus Estados Gobernados, tampoco soluciona el como aumentar la recaudación que es apenas del 10% ´.
Aquí, es cuando la banda del PRI en San Lázaro debe dar entender su posición sobre la política fiscal que quiere aplicar en México, porque el pretender reducir el IVA y mantener el precio de la gasolina, a simple vista dan toda la justificación de ser posiciones mediáticas y populistas, ya que extienden sus ventajas impositivas a la gente que más consume, entiéndase la que tiene más dinero. Como lo mencione anteriormente, la tendencia es a impuestos generales, preferentemente al consumo, con el menor número de excepciones posibles.
Aunque la posición tricolor, también apunta a tareas pendientes cómo las de disminuir los gastos del sector público, aumento de la eficiencia y la transparencia estatal, desvío de fondos destinados a gastos innecesarios del presupuesto hacia inversiones económicas rentables, disminución de la participación estatal en la economía, profesionalización de empresas públicas e instituciones estatales, pero sobre todo el manejo de la cuenta corriente.
Si recordamos que hace un año, el fallido impuesto a la pobreza del 2% le costo a México que las calificadoras Standard & Poor's y Fitch rebajaran la nota soberana. Para el próximo año el reducir la recaudación, básicamente es aumentar el riesgo país, una mala señal para los indicadores macroeconómicos que ya apuntan a salir de la recesión. Si a esto se le agrega que, de modificar el paquete económico no mejora el desempeño del país porque resulta altamente politizado, el costo será que el arranque de la economía sea más lento lo que probablemente se refleje en las cifras del empleo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Mariano Camacho a limpiar IMEVIS

  El día de ayer, el Secretario de Desarrollo Urbano y Obra del Estado de México, Rafael Díaz Leal Barrueta tomó protesta a Mariano Camacho ...